Adolescencia en perros
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Adolescencia en perros

En general, los períodos de crecimiento en humanos y perros son idénticos. Es decir, el comportamiento de una persona y un perro depende en gran medida de factores humorales, es decir, de hormonas. Es durante la adolescencia cuando estos cambios hormonales son más activos, lo que deriva en problemas de conducta.

Para simplificarlo por completo, podemos decir que durante este período, en primer lugar, se produce un crecimiento muy activo y, en segundo lugar, se reconstruye el cerebro. Algunas células mueren, otras vienen a reemplazarlas. Por tanto, parece que el perro ha olvidado todo lo que le enseñaron antes. Y, dicho sea de paso, por eso a este período se le llama segunda socialización. Si en este momento el perro está demasiado sobrecargado, simplemente no podrá hacer frente a la información entrante, lo que, por supuesto, afectará su comportamiento.

Pero si la adolescencia de una persona dura de 5 a 8 años, en los perros pasa mucho más rápido, en uno o dos años, lo que significa que las manifestaciones pueden ser mucho más pronunciadas.

¿Cuándo comienza la adolescencia?

Los primeros signos de maduración en un perro se pueden observar entre los 6 y 9 meses. Es este período el que es la transición de un cachorro a un junior. Pero aún así, los principales cambios en apariencia y carácter ocurren cerca de los 9-10 meses (por cierto, es por eso que puedes inscribir una mascota en la clase junior en la exposición no antes de los 9 meses).

Difícilmente puedes perderte el momento en que tu perro entra en la adolescencia. Tu obediente y simpático cachorro dejará de repente de escuchar la mitad de las frases que le dirigen, dejará de responder a algunos estímulos externos, pero por otro lado, pasará casi todos los paseos con el hocico pegado al suelo. Las mascotas acostumbradas a vivir en libertad pueden huir bastante lejos de sus dueños, lo que antes simplemente no ocurría.

Es durante la adolescencia cuando se producen la mayoría de casos de pérdida de perros.

Un perro adolescente, como una persona, busca los límites de lo permitido, tratando de encontrar su lugar en la “manada”, para dominar. Muchos propietarios, ante este problema, empiezan a comportarse de forma muy estricta con el animal, pensando que de lo contrario perderán por completo el control. Pero este método es absolutamente erróneo y peligroso. Durante la adolescencia, la psique del perro es muy inestable, por lo que un rigor excesivo puede provocar cambios permanentes en el comportamiento (por ejemplo, el perro se vuelve oprimido y cobarde) o una depresión prolongada, que a su vez puede provocar otros problemas de salud.

Además, no debemos olvidar que es durante la adolescencia en los perros cuando los instintos característicos de esta raza comienzan a manifestarse más activamente.

¿Cómo sobrevivir a la adolescencia?

No existe una receta universal sobre cómo sobrevivir a este momento difícil para el perro y el dueño. La regla básica es paciencia y más paciencia. Pero hay algunas recomendaciones que ayudarán tanto al dueño como al perro a superar este período más fácilmente:

  1. Es necesario aumentar el tiempo de las caminatas;

  2. Continúe aprendiendo nuevas órdenes, incluso si parece que el perro ha olvidado todas las antiguas;

  3. Empiece a reaccionar de forma más estricta ante la desobediencia de la mascota, pero en ningún caso traspase la frontera. El abuso físico puede resultar contraproducente. El perro comenzará a tenerle miedo al dueño y esas relaciones no son armoniosas;

  4. Comience a transferir al perro a dos comidas al día;

  5. Debido al crecimiento activo, el estrés excesivo puede afectar negativamente a las articulaciones, por lo que es mejor sustituir correr escaleras y saltar con ejercicios generales y de fondo ligeros del curso de formación.

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