Cómo afecta a nuestro cerebro jugar con un perro
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Cómo afecta a nuestro cerebro jugar con un perro

Ya hemos escrito sobre cómo eficiente comunicación con los animales. Los resultados de una nueva investigación han ampliado nuestra comprensión de cómo jugar con perros afecta nuestro cerebro, y esta es otra razón por la que valdría la pena tener una mascota. 

Foto: publicdomainpictures

Cómo afecta a nuestro cerebro jugar con un perro

Podrías pensar que nuestro cerebro procesa todos los toques de la misma manera, pero resulta que no es así. El cerebro divide las cosas que tocamos en tres categorías:

  • agradable,
  • neutral
  • desagradable.

Cada una de estas categorías se procesa de manera diferente, por lo que los toques agradables nos “entregan” emociones agradables.

Jugar con perros libera serotonina y dopamina, hormonas que mejoran el estado de ánimo. Dado que los niveles de serotonina y dopamina son extremadamente bajos en las personas que sufren de depresión, socializar con un perro puede ayudar a controlar los síntomas de la depresión.

Además, el contacto visual con un perro promueve la liberación de oxitocina, la hormona responsable de la formación del afecto.

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¿Cómo afectan los perros a nuestro bienestar?

Ya se ha demostrado que la canisterapia (terapia animal con perros) reduce el estrés en estudiantes durante una sesión, personas en duelo, niños en hospitales y personas que tienen miedo a volar. En momentos de estrés, la hormona cortisol se libera en la sangre, lo que tiene un efecto negativo en el funcionamiento del cuerpo. Se ha demostrado que los perros reducen los niveles de cortisol en la sangre.

Jugar con un perro también puede normalizar la presión arterial y reducir el riesgo de un ataque al corazón. También en la sociedad de perros, el nivel de ansiedad se reduce.

Los dueños de perros tienen menos probabilidades de sufrir obesidad y sus consecuencias. Mientras paseas con un perro, obtienes una porción adicional de vitamina D, cuya falta afecta el bienestar.

Y los niños que crecen en una sociedad de perros tienen menos probabilidades de sufrir alergias.

Por supuesto, todos los dueños de perros saben cuánto mejoró su vida con la llegada de una mascota. Pero siempre es bueno obtener más evidencia de la ciencia.

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