Resfriados en chinchillas
Roedores

Resfriados en chinchillas

En todas las recomendaciones sobre el mantenimiento de chinchillas, definitivamente encontrará instrucciones sobre la ubicación de la jaula. No se debe instalar una jaula con roedores cerca de una ventana, aparatos de calefacción, fuentes de ruido o luz brillante. Además, debe estar protegido de forma fiable contra corrientes de aire. El caso es que los cambios de temperatura provocan el desarrollo de resfriados que, si no se tratan, pueden tener graves consecuencias.

Junto con las corrientes de aire, los cambios bruscos de temperatura y la alta humedad también provocan un resfriado. Las chinchillas son sensibles a las condiciones y, si su mascota también tiene un sistema inmunológico debilitado, el riesgo de resfriarse se vuelve significativo. Los cachorros de chinchilla son los más afectados por los resfriados. Por lo tanto, es necesario controlar aún más cuidadosamente el clima de la habitación en la que se guarda a los bebés.

En primer lugar, un resfriado está indicado por secreción nasal y fiebre. La t corporal óptima de una chinchilla sana es 36-37,8? C, y enfermo – 38-39? C. Aumento de temperatura hasta 38? C ya es peligroso para una mascota pequeña y dosis más altas representan una amenaza para la vida.

Desafortunadamente, muchos propietarios no consideran que un resfriado sea algo grave y esperan que la dolencia desaparezca por sí sola. Pero, como muestra la práctica, sin una intervención oportuna, incluso un resfriado leve puede provocar complicaciones, en particular bronconeumonía.

La bronconeumonía es una enfermedad grave acompañada de secreción nasal intensa, estornudos, tos, dificultad para respirar y sibilancias. El comportamiento del animal también cambia: se frota el hocico con las patas, se vuelve inquieto, letárgico y su apetito empeora.

Si sospecha de bronconeumonía en su mascota, comuníquese con su veterinario lo antes posible: le recetará medicamentos eficaces. En ningún caso se automedique: en este caso, esto solo agravará la situación.

Si tiene síntomas de resfriado, asegúrese de eliminar las corrientes de aire, normalizar la humedad y la temperatura del aire en la habitación donde se guarda la chinchilla, mejorar la alimentación y aislar la casa del roedor. Asegúrese de consultar con un especialista, tal vez le recete antibióticos y medicamentos para aumentar la inmunidad. Si su mascota está resfriada sin cambios bruscos en el clima interior, reconsidere su dieta. Quizás la chinchilla no reciba suficientes vitaminas y nutrientes, lo que afecta negativamente a su inmunidad. Elija únicamente alimento de alta calidad, completo y equilibrado para sus mascotas.

¡Cuida a tus amiguitos y mantente saludable!

 

Deje un comentario